domingo, 26 de enero de 2014

269-604, una "Gata" muy particular.

Aunque no es un tema estrictamente madrileño, también van a tener su lugar en este blog, las entradas relativas al material motor de Renfe que en algunas ocasiones hayan circulado por las vías de nuestra comunidad. Y que mejor forma de hacerlo comenzando con la locomotora eléctrica 269-604, locomotora única en su género, que tras ser dada de baja del parque de Renfe, se encuentra operativa y en estado de marcha, para la realización de trenes especiales y turísticos, gracias al interés de la Asociación de Amigos del Ferrocarril de Madrid, AAFM.
Desde hace ya varios años, diversas asociaciones de amigos del ferrocarril repartidas por toda España, se han implicado directamente en la preservación del material motor y móvil ferroviario considerado histórico, completando así la labor realizada en éste sentido por diversas instituciones, como la Fundación de los Ferrocarriles Españoles o el Museo del Ferrocarril.
Locomotora serie 269 del primer lote circulando por la línea Madrid-Irún a la altura de la Casa de Campo.
Foto Colección César Mohedas.
Centrándonos en nuestra comunidad, existen dos asociaciones destacadas en esta labor: la ya citada Asociación de Amigos del Ferrocarril de Madrid, AAFM, con local social en la madrileña estación de Delicias, sede del Museo del Ferrocarril, y el Centro de Iniciativas Ferroviarias Vapor-Madrid, CIFVM, ubicado en el barrio argandeño de La Poveda.
El CIFVM se dedica fundamentalmente al material de vía estrecha, mientras que la AAFM hace lo propio con material de ancho Renfe, contando entre el material a su cargo con la locomotora eléctrica 269-604, dos unidades eléctricas (una Suiza y otra serie 440), así como diverso material remolcado para la realización de los trenes especiales.
La locomotora eléctrica 269-604, objeto de esta entrada, formaba parte de un lote de cuatro locomotoras numeradas 269-601 a 269-604, cuyos orígenes se remontan al 25 de abril 1978, cuando Renfe aprobó un Plan de Actuación Urgente en el que se incluía la realización de una contratación de material ferroviario de acuerdo con dos horizontes económicos sucesivos de 14.000 y 22.000 millones de pesetas.
En ese momento, Renfe estaba en un nivel muy bajo de inversiones en material rodante, hasta el punto de que muchos servicios no podían prestarse por falta de tracción, con un alto grado de utilización del material lo que dificultaba su conservación y reparación, existiendo, por otra parte, un importante sector económico que dependía en el mercado interior en mas de un 50% de la capacidad compradora de Renfe.
De acuerdo con estos horizontes económicos y previos los estudios necesarios, se estableció el programa de contratación de material para cubrir el nivel de inversión, consistente en:
  • 25 locomotoras eléctricas serie 269
  • 30 locomotoras eléctricas serie 250
  • 20 Unidades Eléctricas serie 440 en composición M-Ri-Rc
  • 10 Unidades Eléctricas serie 440 en composición M-Rc
  • 14 Electrotrenes M-Ri-Rc
  •   6 Ri de Electrotren
  •   3 Unidades Eléctricas para el Ferrocarril del Guadarrama
  • 20 Trenes Diesel
Exceptuando el lote de 30 locomotoras serie 250, cuya construcción fue adjudicada el 25 de abril de 1978, y ampliada en 10  locomotoras más el 16 de noviembre de 1979, y los 20 trenes diesel (que darían lugar a las series 592 y 593 tras varias ampliaciones sucesivas del suministro), adjudicados el 27 de julio de 1978, el resto del material no era susceptible de ser concursado ya que al ser material conocido y fabricado con anterioridad por diferentes empresas no era posible establecer concursos con un mínimo de condiciones de equidad, ya que la ventaja sería absoluta para los fabricantes ya expertos.
Por ello se consideró muy preferible en sistema de negociación directa, iniciándose las conversaciones correspondientes a la adquisición de las 25 locomotoras serie 269 en el mes de mayo de 1978.


Estas locomotoras eran continuación de serie de las 130 adquiridas por Renfe desde el año 1972, y las negociaciones se llevaron a cabo con los constructores habituales, Caf, Wesa y Melco, a los que se le sumó Macosa, con el fin de mejorar su reducida cartera de pedidos.
Finalmente, y tras llegar a un acuerdo en las conversaciones, el 27 de junio de 1978, el Consejo de Administración de Renfe, presidido por Ignacio Bayón Mariné, adjudicó la construcción de las 25 locomotoras a Caf, Macosa, Wesa y Melco, distribuidas de la siguiente manera:
  • 21 locomotoras de línea serie 269, con control convencional, al precio unitario de 69.496.727 pesetas más 29.497.386 yens.
  • 2 locomotoras de línea serie 269, con control Chopper construidas íntegramente en Japón, al precio unitario de 246.936.720 yens.
  • 2 locomotoras de línea serie 269, con control Chopper construidas en España con equipos de importación, por un precio unitario de 36.759.390 pesetas más 143.792.312 yens.
Como vemos, de las 25 locomotoras, 4 irían dotadas de equipos de control de potencia por tiristores (Chopper), dos de ellas fabricadas completamente en Japón y las otras dos construidas en España con equipos importados, mientras que las 21 restantes, de equipos clásicos, serían construidas en España, siendo la numeración asignada, la siguiente:
  • 269-201 a 269-221 para las locomotoras convencionales
  • 269-601 a 269-602 para las locomotoras Chopper construidas en Japón
  • 269-603 a 269-604 para las locomotoras Chopper construidas en España
Para los profanos, diremos que el chopper o "troceador" de corriente permite una regulación de la marcha más eficaz y suave que el sistema de regulación convencional por resistencias, que equipa el resto de la serie 269, proporcionando además una mejor adherencia y un mayor ahorro energético, así como prestaciones como la velocidad prefijada. Los primeros vehículos dotados de chopper en Renfe fueron las unidades 440-501 y 440-502, en plan experimental, al igual que las cuatro locomotoras 269-601 a 269-604, de cara a su adopción de forma definitiva en series posteriores.
El plazo de entrega de las locomotoras quedó establecido entre julio-agosto de 1979 y febrero de 1980 para las 21 locomotoras convencionales; enero de 1980 en FOB puerto japonés (con llegada prevista a España en marzo de 1980) para las dos locomotoras completamente de importación con Chopper; y abril de 1980 para las dos locomotoras nacionales con Chopper.
Seguidamente, la Dirección General de Renfe procedió a establecer el oportuno contrato que quedó formalizado el 24 de noviembre de 1978.
Locomotoras 269 "Mazinger" en proceso de construcción en CAF-Beasain. Foto CAF. Colección César Mohedas.
Todas las locomotoras entraron en servicio entre 1980 y 1981, con un ligero retraso sobre las previsiones, portando los colores azul y amarillo en forma zigzageante, lo que les valió el sobrenombre de "Mazinger", a pesar de que las dos primeras chopper, procedentes de Japón, llegaron con el color verde tradicional en Renfe hasta entonces.
La locomotora 269-601 en CAF-Beasain tras ser repintada con los colores "Mazinger" antes de entrar en servicio.
Foto CAF. Colección César Mohedas. 
Continuando con nuestras cuatro locomotoras chopper, muy pronto iba a cambiar el curso de su historia, pues el 30 de abril de 1987 era aprobado el Plan de Transporte Ferroviario, entre cuyas actuaciones se incluía el aumento de la velocidad en ciertos corredores hasta los 200 km/h, así como la construcción del Nuevo Acceso Ferroviario a Andalucía por Brazatortas (germen de la actual línea del AVE Madrid-Sevilla).
Locomotora 269-601 en Fuencarral. Foto José Sequeros.
Para todo ello era preciso tanto la adquisición de nuevo material rodante, como la reforma del existente para poder circular a los 200 km/h.
De esta forma, en 1988 son enviadas a CAF-Beasain, las cuatro locomotoras 269-600, recibiendo un nuevo bogie apto para los 200 km/h, a la vez que se procedía a la remodelación exterior de las cajas, dándolas un aire mas aerodinámico, con el fin de disminuir su resistencia al aire.
Sin embargo, cuando ya se había terminado la remodelación de la 269-604 y se tenía ya acopiado el material para remodelar las tres restantes locomotoras, Renfe abandonó el proyecto dato su elevado importe, quedando, de esta forma, dicha locomotora como ejemplar único.
Locomotora 269-604 recibiendo la nueva carrocería y decoración. Foto Colección César Mohedas.
El proyecto de remodelación fue encargado a una empresa externa de Barcelona, AD Associate Designers, que fue también la responsable de la adopción de los colores amarillo y gris, implantados posterirmente en todo el parque motor de tracción (esta empresa sería también la responsable del diseño, entre otros, de las unidades de cercanías serie 446), así como de incluir el dibujo de una mascota en el lateral, un gato montés algo robotizado, por lo que, desde entonces, la locomotora fue conocida como "La Gata".
A partir de entonces, la 269-604 fue objeto de las miradas en diversas exposiciones relacionadas con la nueva red de alta velocidad.
La 269-604 en Fuencarral. Foto José Sequeros.

Locomotora 269-604 en Cerro Negro. Foto Marcelino Toret.
Por otra parte, las cuatro locomotoras de la serie formaron parte de diversas pruebas a 200 km/h, batiendo el record absoluto de velocidad con tracción eléctrica en las líneas de ancho convencional el 24 de abril de 1991, con 241,3 km/h alcanzado por la locomotora 269-601.
Finalmente, el ocaso de estas locomotoras llegó en 2007, debido a la entrada en servicio, el 23 de diciembre, de la nueva línea AVE Madrid-Valladolid, lo que trajo como consecuencia la modificación de todos los servicios transversales que se convertirían en Alvias de ancho variable, gracias a los cambiadores de Madrid-Chamartín, Medina del Campo, Valdestillas y Valladolid, eliminándose numerosos servicios diurnos, lo que implicó la retirada del servicio de las cuatro locomotoras chopper, quedando apartadas en Santander el 22 de diciembre de 2007.
 
La locomotora 269-604, pintada con los colores de Grandes Líneas, realizando una circulación especial Santander-Madrid, a su paso por El Escorial. 21 de julio de 2013. Foto Ilia Domínguez.
Como curiosidad añadiremos que el último servicio comercial realizado por la 269.604 fue el Costa Verde, Madrid-Santander, desde la estación de Venta de Baños, el 21 de diciembre de 2007, cuando ya se encontraba apartada.
Es en ese momento cuando la AAFM inicia las conversaciones con Renfe-Operadora para que les sea cedida la 269-604, bajando finalmente a Madrid el 3 de julio de 2008.
Para terminar diremos que, de las tres locomotoras restantes de la serie, la 269.601 se encuentra preservada en Monforte de Lemos, cedida al Museo del Ferrocarril de Galicia, la 269-602 se encuentra apartada en Santander, y la 269-603 ha sido la única desguazada.
La 269-603 poco antes de entrar en el taller de pintura de Fuencarral para recibir la nueva decoración en amarillo y gris.
Foto Marcelino Toret.
Agradecimientos: A José Sequeros, Ilia Domínguez y Marcelino Toret, por la cesión de fotografías.